Dentro de dos domingos nos vuelven a cambiar la hora, y eso significa que se aproxima el verano, cosa que me alegra de veras. Es increíble lo que puede cambiar el humor de las personas simplemente teniendo una hora más de luz al día. Y con el paso de los días los días se van a hacer más y más largos lo que nos compensa sobremanera para poder estar en la playa hasta las once de la noche, por norma general intento aprovechar la playa hasta el final, voy todos los días que haga calor suficiente y me quedo hasta un poco más allá de que se ponga el sol, normalmente soy el último en irme de la playa, lo que me favorece para no coger atascos a la vuelta de la playa, no me gustan los atascos y menos cuando hace calor y no puedes hacer nada para remediarlo.
Y con el cambio de hora llega la playa y con ella la gente va a empezar a ponerse nerviosa porque en invierno no consiguió adelgazar lo suficiente para poder lucir modelito, por lo que muchos y muchas van a ponerse a dieta para lucir tipito en la playa este año. Habrá gente que con hacer dieta les llegue pero hay mucha gente que prefiere hacer otras cosas para ello, por ejemplo habrá gente que preferirá hacerse una lipoescultura a tener que pasar hambre, aunque para ello hace falta dinero y para ponerse a dieta más bien ahorras un poco de dinero, por lo que otro punto a favor de ponerse a dieta.
Aunque lo de ponerse a dieta para ir a la playa es algo que no puedo entender muy bien, ya que yo estoy un poco gordo pero no tengo complejos con mi cuerpo y me acepto tal como soy y eso es lo que debería de hacer todo el mundo. Pero en los tiempos que corren se le rinde demasiado culto al cuerpo, eso no lo veo muy bien ya que a los gordos nos dan un poco de lado, pero no nos queda otra cosa que acostumbrarnos.