Los niños de hoy en día no saben cómo jugar, creen que solo pueden jugar con el ordenador o con los teléfonos móviles de sus padres, pero están muy equivocados. Esos juego solamente les llaman la atención porque tienen muchas luces de diferentes colores, son como las tragaperras para los adultos, es el mismo principio.
El otro día le compramos al hijo de uno de mis amigos unas Alfombras de juegos para niños con unas carreteras dibujadas y el niño casi ni sabía para qué era, al final le enseñamos que con sus coches de juguete podía jugar allí todo el tiempo del mundo, pero como no tenía música ni luces de colores no es que le hubiese hecho demasiada ilusión, y terminamos jugando el padre del niño y yo mucho más de lo que jugó el niño. Después el niño como veía que su padre y yo nos lo estábamos pasando bien quiso venir a jugar y se lo pasó mucho mejor que jugando con la consola de videojuegos.
Ahora que llega el verano es un gran momento para llevar a los niños a campamentos en donde les enseñarán a jugar a jugar con otros niños y niñas a infinitos juegos de los cuales desconocían la existencia de casi todos ellos. Y al mismo tiempo quitarles el vicio de los juegos de las videoconsolas y los teléfonos móviles, que están demasiado mal acostumbrados.
Tengo una pareja de amigos que tienen dos niñas entre siete y cuatro años que cada una tiene su propia tablet para poder jugar a sus juegos correspondientes, y eso no me parece en absoluto normal, primero, una niña da igual la edad que tenga no tiene que tener una tablet, debería de tener juegos normales y no pasarse el día enganchada a un juego que no enseña nada de nada. Para los padres es muy cómodo, porque mientras los niños están embobados viendo la pantalla es menos tiempo que les están molestando y tienen que hacerles caso durante mucho más tiempo del que deberían, que básicamente era lo mismo que hacían con nosotros con la televisión, pero por lo menos con la televisión aprendes cosas.