Estores y cortinas
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Cómo decorar una salita auxiliar

Ya no se lleva eso de que en una casa haya un salón para visitas y una salita familiar. Pero cada vez es más habitual contar con un salón para toda la familia y una salita auxiliar para que algún miembro en concreto pueda estar viendo otro programa de televisión o realizando otra actividad. En algunas casas se usa para que los más jóvenes jueguen a su consola con los amigos o para dividirse cuando parte de la familia quiere ver deportes y otra parte prefiere ver cine.

Este tipo de salitas suelen ser bastante informales y prácticas y en muchos casos incluso son multiusos. No solo se emplean para ver la tele sino que son el cuarto de planchar, la sala de costura o un lugar para trabajar en casa. En las casas más pequeñas incluso se transforman en habitación de invitados si es preciso.

Para lograr una habitación así de polivalente el primer paso es escoger el sofá, que debe de ser un sofá cama sencillo y que no ocupe demasiado espacio. Normalmente, se escoge un sofá de tres plazas no muy grande, sin demasiado brazo para que haya más holgura en la habitación y se decora con cojines para hacerlo más acogedor. 

Para lograr más amplitud, se recomienda prescindir de la mesa de centro e incluso de la mesa de televisión, pudiendo esta quedar colgada en la pared. Tal vez, para que el resultado sea más acogedor, se puede instalar un estante justo debajo para enmarcarla.

Si hay una ventana adecuada, puede colocarse un escritorio justo debajo. Puede ser una mesa fija o se puede optar por un escritorio plegable, de los que quedan pegados a la pared cuando no se usan. Si el cuarto se va a utilizar para coser, realizar manualidades u otras actividades de este tipo, entonces es preferible una mesa más grande, que puede realizarse con un tablón rústico y pies de hierro forjado. De esta manera, se construirá justo a la medida del espacio.

Los estores a medida son otro pequeño lujo que nos debemos de plantear. Unos screen que protejan del sol y den intimidad a la vez que aportan luz pueden ser ideales para este espacio. Y, por último, no olvidemos una gran alfombra que aporte esa calidez que toda sala de estar necesita y que puede darle también un toque de color junto con el sofá.

Bodegas
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4 claves para un viaje inolvidable a las Rías Baixas

Hay muchas cosas que puedes hacer en tu viaje a las Rías Baixas y otras que debes de hacer casi obligatoriamente.  Planear todo con antelación te permitirá disfrutar de algunas experiencias que a priori pueden parecer menos populares pero que resulta complicado disfrutar si no se han hecho reservas.

Organiza una visita a alguna de las mejores bodegas rias baixas. Este tipo de turismo es cada vez más popular y el número de personas que pueden visitar las bodegas cada día es bastante limitado. Por eso, lo mejor es hacer reserva. Se recomienda escoger un buen guía que nos pueda contar todo sobre la elaboración del vino. Una de las mejores partes de la visita viene cuando nos permiten catar los vinos, disfrutando del sabor de una de las mejores bebidas del sur de Galicia.

Otra reserva imprescindible que hay que realizar es en un furancho. Este tipo de establecimientos que abren sólo durante unos meses al año, se han puesto muy de moda. Esto ha hecho que sitios a los que antes era posible acudir a cenar sin una reserva, ahora estén tan demandados que hay que solicitar sitio con varios días de antelación. 

Los furanchos originales eran casas particulares que se abrían al público para vender el vino que quedaba en las bodegas antes de comenzar a llenarlas con el nuevo vino del año. Actualmente, son lugares un poco más profesionalizados aunque las  normas son rígidas para diferenciarlos de establecimientos de hostelería normales.

Visitar la isla de Ons es otra de las opciones que tienes en las Rías Baixas y que tienes que reservar con antelación. Todo el mundo conoce las Islas Cíes pero Ons era un paraíso más desconocido. Sin embargo, ahora es un lugar de turismo muy solicitado ya que muchos se han dado cuenta de que tiene mucho que ofrecer y nada que envidiar al pequeño archipiélago vecino.

Disfruta de una maravillosa puesta de sol. Esto es algo que muchos se pierden cuando viajan a las Rías Baixas por poco tiempo y que, sin embargo, es uno de los espectáculos más bonitos. Además, no hay que reservar nada. Muchas playas están orientadas de manera perfecta para ver el sol poniéndose en las aguas del Atlántico, solo hay que sentarse y esperar para observar uno de los espectáculos más bonitos que puedes ver en este lugar.