Enrollables a medida, dos métodos para un mismo fin
Comprar Estores enrollables a medida puede ser la mejor solución para ventanas de gran tamaño o cuando se quiere que tengan un acabado absolutamente perfecto. Existen diferentes tipos de estores enrollables a medida que podemos encontrar en el mercado, pero principalmente son dos los estilos que podemos comprar.
En primer lugar, nos encontramos con estores enrollables recortables. Son estores que tienen diferentes medidas y que, dado que no están rematados en los laterales, pueden cortarse para adaptarlos al hueco que se desee. Por ejemplo, si buscamos un estor de 122 cm, podemos comprar uno de 150 cm, una medida estándar, marcar los 122 centímetros en cada lado, trazar una línea y recortar la tela.
El sistema enrollable es extensible, por lo que se adaptará a la nueva medida sin problemas y se tendrá un estor de una medida personalizada, pero pagando tan solo lo que cuesta un estor estándar. Dado que cada vez hay más diversidad de medidas en el mercado, es mucho más fácil encontrar, para el ejemplo dado, alternativas más cercanas a la medida que deseamos, como podría ser un estor de 130 cm. De esta manera, ahorraríamos dinero ya que cuanto más pequeño es el estor, menos dinero nos cuesta cuando hablamos de modelos idénticos.
Además de que el precio es menor, nos permite volver a personalizar el estor si deseamos adaptarlo a otra ventana más pequeña en el futuro o incluso probar, si no estamos seguros de cómo quedará bien, con una medida más grande primero y, si no nos gusta, acortarlo de nuevo.
El otro estilo de estores son los personalizados desde el inicio. Se encargan en tiendas especializadas en las cuales tienen en cuenta todas las medidas que les damos, tanto en el ancho como en el largo, creando a partir de estas un estor que va a encajar perfectamente en esta ventana.
Este tipo de estores son más caros, pero tienen la ventaja de que no hay que ceñirse a los modelos que pueda haber en el mercado dentro del tamaño que necesitamos, sino que escogemos la tela que nos gusta y nos lo harán en el tamaño deseado.
Además, la tela estará mucho mejor rematada por los laterales, sin riesgo de que se pueda deshilachar o que se vea desigual si no se corta de una manera cuidadosa. Por tanto, resultarán más elegantes.